Sábado 20 de Abril de 2024

Hoy es Sábado 20 de Abril de 2024 y son las 07:23 -

REGIONALES

9 de enero de 2012

Una asamblea decidirá la continuidad del policlínico de Rafaela

Una asamblea convocada por la Asociación Médica del Departamento Castellanos (AMDC) tendrá sobre sus espaldas la trascendental responsabilidad de apostar a la continuidad del Policlínico Rafaela –mediante la autorización al directorio para su venta- o, en cambio, forzar a la entidad a seguir navegando hacia la deriva, con riesgo inminente de arrastrar en corriente de naufragio a la propia gremial.

 

Nada menos que el destino inmediato de 50 empleos en forma directa –los trabajadores del Policlínico Rafaela S.A.-, y a su vez, ya en forma indirecta la afectación de muchos otros, además de cuestiones institucionales, dependerá del resultado de una asamblea convocada para el próximo viernes por la Asociación Médica del Departamento Castellanos.

La importancia y la premura de lo que se pondrá en juego hizo que, si bien cumpliendo todos los pasos legales y estatutarios, la convocatoria coincida con una fecha asociada al receso veraniego.

Los profesionales nucleados en la AMDC podrán habilitar al actual Directorio –que ya dio muestras de cambio en sentido de trasparentar sus acciones- para llevar adelante una eventual venta de todo o parte de la entidad sanatorial, habida cuenta la asfixia financiera y jurídica en la que se encuentra, y la frustración de otras alternativas.

De acuerdo a una información a la cual fidedignamente accedió CASTELLANOS, existirían posibilidades de encarar negociaciones que lleguen a buen puerto.

Los objetivos en ese orden son varios, pero, prioritariamente se enfocarán a preservar tanto a la entidad sanatorial como a la totalidad de los puestos de trabajo.

También se buscará, mediante el eventual desembolso de una importante suma de dinero, especulándose sólo con un valor aproximado  al de la edificación, para sanear financieramente buena parte de los errores y desvíos de gestiones anteriores. Fundamentalmente “levantamiento” del concurso preventivo que se tramita por ante los tribunales locales, y cuya primera cuota vence en febrero.

En una reunión de Comisión Directiva ampliada, ya se dio información detallada de la delicadísima pendiente financiera, económica y judicial que puso no sólo a la entidad sanatorial al borde del abismo, sino que condiciona la factibilidad de la subsistencia de la gremial médica. Algo que por sus operatorias contrarias a diversas normas legales vigentes, ya registró antecedentes tales como veedurías de la IGPJ (Inspección General de Personerías Jurídicas) de la provincia y hasta una intervención evitada a contrareloj.

Increíble, pero real
A modo de remake de un fracasado western cinematográfico, en cierta forma coherente pero que afectó la credulidad de los galenos que de buena fe comenzaron un proceso para resguardar a la institución gremial de todos sus colegas, desde hace un tiempo reapareció en escena “el núcleo duro” de la camada de ex dirigentes responsable de resultados ruinosos.

La pre-conclusión precedente parte de la base que los planteos de los “ex”, lejos de aportar, lisa y llanamente insistieron en la comisión de gruesos errores –algunos derivaron en delitos probados por la justicia-, y, en lo que respecta al planteo central, se opusieron en la citada reunión “ampliada”, a autorizar una eventual venta del Policlínico. Y sin plantear alternativas viables y concretas. Prolongando de esa manera una agonía cuyos efectos irreversibles y devastadores aparecen a la vuelta de la esquina.

Por más que se proponga brevedad y capacidad de síntesis, cualquier resumen del derrotero que vinculó a la Asociación Médica con el Policlínico sería insoportable por su extensión y complejidad para los lectores.

Las nefastas consecuencias y los ominosos métodos empleados ya se fueron conociendo. El fundamento teórico: “el sanatorio gremial”. Pero los supuestos beneficios invocados chocaron con realidades incontrastables. Menos de un 5 % del padrón de médicos trabaja bajo el paraguas del sanatorio que fundaran los Barreiro.

Por el contrario, los “beneficiados” con cargos directivos, o con desapegos tales como el no pagar por un año el alquiler de un consultorio, han sido siempre aquellos vinculados con lo que el ex jefe de la Zona de Salud, Alejandro Ruiz Díaz auto-definiera como “grupo de poder”.

Además de significar enormes esfuerzos económicos solventados con el erario común a todos los profesionales, se desviaron para mantener la aventura en forma irregular fondos desde la Mutual a la postre intervenida.

Tal vez la mayor de las irregularidades, volviendo al Policlínico fue aquella asamblea convocada entre gallos y medianoche con el objeto de licuar participación accionaria de algunos integrantes,  y en la un médico no reparó en falsificar un documento, y su entonces apoderado legal en ejercer dobles representaciones, por los que fueron procesados penalmente.

En la parte civil también las consecuencias fueron muy graves para la entidad: “si se hubiese gastado la mitad de lo empleado en abogados a capacitación o a invertir, hoy la ciudad hablaría de una gremial médica modelo”, dijo un médico.

Paralelamente, fueron sobreviniendo sólo más problemas para el Policlínico. La millonaria deuda por la cual la entidad está al borde de la quiebra. La pérdida de las cápitas de PAMI y de IAPOS. Todo ello en buena parte por el aislamiento que también en lo político llevó la anterior conducción a la AMDC.

Justamente, el reciclado grupo esgrime por estos días una solución política, pero lo cierto es que desde todos los gobiernos y grupos políticos le han dado la espalda. A pesar de la identificación y militancia de varios de sus integrantes con el socialismo gobernante, la provincia, con atino, al estudiar los hechos se limitó a exigir la regularización jurídica de “la médica” antes de sentarse a escuchar pedidos.


Un dato no menor
Una  ayuda o salida concreta para el Policlínico, de acuerdo a lo que incluso se sabe hasta puertas afuera de la AMDC, es urgente y necesaria

Son muchas las ecuaciones de costos y beneficios a tener en cuenta, pero la variable más temida es la situación del medio centenar de empleados. “Con mucho esfuerzo le hemos pagado el aguinaldo, pero no tenemos de dónde sacar para pagarles el sueldo de enero”, confesó un directivo vinculado a la AMDC a este Diario.

Pero el problema es tanto coyuntural como proyectado a futuro. También en febrero vence la primera de las diez cuotas pactadas con los acreedores en el marco del concurso preventivo, que orilla el medio millón de pesos.

El riesgo de quebranto es muy alto. Sumado a otros escollos dejaría en la calle a los empleados. Estos no tendrían en principio otras opciones que dirigirse a la propia AMDC para reclarmar por sus créditos laborales. “Nos van a rematar hasta las sillas”, lanzó como desesperado vaticinio otro directivo actual. Más empleados, en este caso de la propia gremial, están a la expectativa de lo que pase el Viernes 13. Fecha que supersticiones aparte, será por todo lo dicho clave, y sin temor a exageraciones histórica.

COMPARTIR:

Comentarios

Escribir un comentario »

Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!