Desde hace algún tiempo, la Argentina se convirtió en un país que hace parte de la denominada ruta de la droga y la presencia de narcotraficantes colombianos en territorio nacional se acrecienta día a día. Las reiteradas capturas y crímenes de delincuentes colombianos aumentó la preocupación de las autoridades argentinas. 

La semana pasada, un ex sicario colombiano identificado como Jairo "Mojarro" Saldarriaga, fue acribillado en pleno barrio de Recoleta y ante la mirada de cientos de personas. De acuerdo con la investigación, se trató de un asesinato ordenado por el principal narco colombiano de la actualidad y ex jefe de la vícitima, Daniel "El Loco" Barrera, en venganza porque Saldarriaga le entregó a la Policía un cargamento de 500 kilos de cocaína. 

Este hecho encendió las alarmas a tal punto, que la semana pasada el embajador de Colombia en el país, Carlos Rodado Noriega, se reunió con la ministra de Seguridad,Nilda Garré. Incluso, la semana pasada aterrizó en Ezeiza el general Luis Alberto Pérez Albarán, director de la División Antinarcóticos de la Policía colombiana para capacitar a los efectivos locales e interiorizarse en el caso del sicario de Recoleta.

Pero el caso de alias "Mojarro" de la semana pasada no fue el único. En 2008, este ex sicario mató a balazos a dos narcos paramilitares en el estacionamiento subterráneo del shopping Unicenter. Por ese entonces, el asesino trabajaba para Barrera. Tres meses antes, otros dos colombianos aparecieron calcinados y descuartizados en La Matanza. 

El "ex empleado" del capo de la mafia colombiana había huído de Colombia e ingresó a la Argentina, bajo la identidad de Carlos Brausin García. 

El crimen de Recoleta ocurrió apenas dos semanas después de la operación denominada ‘Luis XV’, en la que se desarticuló a una banda de narcos que intentaba traficar droga oculta en el interior de muebles antiguos. La mitad de los detenidos fue de nacionalidad colombiana. Entre ellos, dos mujeres cuya historia está ligada al cartel de Barrera Barrera: su exesposa, Ruth Martínez Rodríguez, y María Claudia Gómez Martínez, viuda de, publicó el diario colombiano El Espectador.